Surcare los
mares del poniente
Arrullando
los cantos del alma
Nunca tendré
enojos con calma
Irradia
versos el alma paciente
Subiré
tranquilo a la palma
Impresionado
me siento valiente
Densas
llamas de amor arden en el alma
Recorro
ríos y playas ardientes
Ornare con
flores el naciente