Cantaban a
las mujeres de la aldea
Hechizando
a los corazones quinceañeros
Ilusionados
los tiples florecían
Penetraban
sabiamente en los jardines
Allí el
verso y el amor se confundían
Terminaban
escuchando las canciones
A los
hombres el corazón les entregaba
No hay comentarios.:
Publicar un comentario